Para el magisterio adherido al Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), los pocos avances conquistados por la Sección 45 entre 2015 y 2020 fueron triturados por Rigoberto Macías, un ejemplo de negligencia y olvido.
En la Sección 45 ha reinado la opacidad y el silencio. No hay datos claros sobre la efectividad de las políticas que protegen al magisterio ni evaluaciones del desempeño sindical. El secretario general de la Sección 45, Rigoberto Macías, tampoco ha rendido informes financieros y se mantiene alejado de las bases que reclaman claridad en el manejo de los dineros.
MARTIRIO DOCENTE
Sobre la actual situación magisterial, los maestros expusieron como dos puntos perversos y dañinos la destrucción de los programas de actualización profesional y el incremento de la burocracia sindical, controlada por América Montaño, a quien tienen identificada como “la mano detrás del trono”.
“En vez de brindarnos apoyo con más programas de capacitación e incentivos, nos traen haciendo un montón de documentos que luego no sabemos ni para qué sirven, andamos llenando formularios a las carreras y después no sabes ni para qué los usan”, denunciaron.
