La diputada local Margarita Rionda se olvidó por completo del municipio de Dolores Hidalgo, municipio que integra junto con Guanajuato Capital el octavo distrito que ella representa.
En el primer semestre de este año, la diputada solo se ha dedicado a pasear por Guanajuato Capital, relegando sus labores legislativas al plano secundario.
Desde que inició la LXV Legislatura del Congreso local (2021-2024), Rionda no tiene puntos de acuerdo enlistados para atender problemas específicos de los dos municipios que representa ni ha presentado iniciativas a favor del patrimonio cultural de su distrito, conformado por dos importantes destinos turísticos del estado.
Por ejemplo, Rionda se mantiene indiferente —y sigue sin gestionar apoyos— ante el drástico tijerazo presupuestal con el que la Federación castigó a Guanajuato Capital, Ciudad Patrimonio desde 1988, y Dolores Hidalgo, Pueblo Mágico desde 2002.
Guanajuato Capital, también sede del Festival Internacional Cervantino, y Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional, perdieron recursos extraordinarios del Gobierno Federal desde la llegada de López Obrador, pero la legisladora panista prefiere pasearse solo para la foto, aunque en su resumen curricular presume haber sido gestora en la Asociación de Ciudades Mexicanas del Patrimonio Mundial, un cargo que ni siquiera existe dentro del organigrama de dicha red de protección patrimonial.
