En Silao, MORENA devora MORENA. La presumible designación en Silao a favor de ex panistas ya levantó protestas por parte de diversos frentes bélicos. Con este ambiente de raspones e inconformidades, los nombres se acumulan por montones en el elenco de aspirantes a la Presidencia Municipal de Silao, y anótele usted, en orden de preeminencia: José Luis Araujo, Manuel Orellana, Flaviano Chávez, ‘Fito’ Alcalá, Juan Antonio Morales Maciel, Rogelio Santoyo, Víctor Nila, Carlos Caballero, Ricardo García Oseguera, Ricardo Blancarte, Carlos García, Juana Landón y hasta ‘Pita’ Espinosa. Hay perfiles de todos los moles: morenistas de la célula madre y de la nueva ola, ex panistas, ex priistas, oportunistas, saltimbanquis, mixtos e informales. Pero prevalece, a pesar de los linajes, una constante que después del triunvirato Araujo-Chávez-Alcalá, pareciese marcar el rumbo: no a los ex panistas.
Desde hace un par de semanas, se mantiene vivo el rumor de los estudios, numéricos y cualitativos, que se habrían levantado para la selección del candidato a la Presidencia Municipal. Queda la duda sobre la verosimilitud y la validez de esos estudios, porque en otros lugares del país ya estalló la bomba por esas encuestas, utilizadas como método —muy opaco y anodino— de selección. En esta leyenda demoscópicamente morenista, se percibe un proceso doméstico que atraviesa por el tamiz de las encuestas que nadie ve ni supervisa, y que insertan y descartan nombres, nombres y más nombres, más de los que usted podría encontrar en el Antiguo Testamento.
Atados la perredista tradición de no reconocer resultados ni posturas externas, 3 morenistas se entrelazaron y crearon un Frente Lopezobradorista para vacunarse contra la imposición que avizoran más infecciosa que la de hace 3 años, cuando el ex panista Carlos García obtuvo la candidatura por medio del Partido Encuentro Social (PES) como caballo fársico de Troya. El profesor José Luis Araujo, el fotógrafo Flaviano Chávez y el ultradefensor de la Cuarta Transformación, Adolfo Alcalá, se presentaron como los únicos tres caballeros de MORENA con el derecho a contender por la Presidencia Municipal, por no provenir ni tener nexos con el PAN. En su presentación, realizada en patios del ex presidente Fernando Mondelo Liceaga (PRI), aseguraron que rechazan cualquier intento de imposición por parte del mando central de MORENA, ya que tanto el ex panista Francisco Ricardo Sheffield como el impresentable Ricardo García Oseguera pretenden imponer a Morales Maciel como candidato a la Presidencia Municipal, con una “pequeña ayuda” del clan Valdovino, a su vez enlazado con el regidor panista David Tovar, quien —por cierto— presume la bendición del patriarca del Yunque, Elías Villegas. Por lo antes expuesto, no se vaya a sorprender por las decisiones que tome el partido de López Obrador en Silao, que inclusive está proyectando la adopción de la regidora Diana Paco como candidata a la diputación federal del distrito nueve, hoy en manos de la panista Melanie Murillo.
En dado caso de que MORENA opte por Morales Maciel o Carlos García, ambos desprendidos de Acción Nacional, el triunvirato tronará contra el proceso de selección, al que ya pueden ir calificándolo como una “insultante farsa”, pues nadie sabe cuáles voces y criterios se están tomando en cuenta para estar determinando quiénes son los que muestran mayor capacidad para ser candidato. Después de la modificación del género (de femenino a masculino y a la visconversa) y de la extinción del convenio de coalición entre MORENA y el Partido del Trabajo (PT), ya cualquier cosa puede pasar en el proceso interno de selección del candidato a la Presidencia Municipal de Silao. Hasta Garfield, por sus garras o su voraz apetito, puede salir nominado.